Las cifras de la inmigración a Europa por el Mediterráneo
INMIGRACIÓN: LAS CIFRAS DE 2023
Casi 140.000 “inmigrantes ilegales” han llegado en lo que va de año a las costas de Italia o Malta. Otros 120.000 han sido interceptados y devueltos a Libia por sus guardacostas, y casi 2.200 (ocho diarios en promedio) han perdido la vida en el Mediterráneo central cuando huían de la guerra, la persecución o el hambre. El repunte de llegadas es la señal de alarma de la falta crónica de inversión y oportunidades para las personas en el África subsahariana. Así lo explica Médicos sin Fronteras.
Los acuerdos millonarios de la Unión europea con países como Libia, Túnez o Marruecos, para que estos países hagan el trabajo sucio de impedir el tránsito de los migrantes, han resultado desastrosos en términos humanitarios. En esos países los migrantes son sometidos a tratos inhumanos, torturas, extorsión, esclavitud y otras variadas formas de violencia.
La Organización señala que las prácticas fronterizas violentas y la “inacción deliberada” de los Estados europeos han hecho de este año hayan muerto 2.200 migrantes en el Mediterráneo central; es el año más mortífero desde 2017. En los últimos 10 años, los muertos en la zona suman 22.300 muertos.
En 2015, ante la inacción y obstrucción de los gobiernos, las ONG asumieron la responsabilidad de los rescates, pero algunos Estados, sobre todo Italia, han adoptado medidas cada vez más restrictivas a la labor de estas ONG. Italia asigna puertos lejanos para el desembarque a los buques de rescate, lo que los obliga a retrasar la debida asistencia a los inmigrantes y les impide socorrer a otros.
Desde 2021, el barco Geo Barents, de Médicos sin Fronteras, ha rescatado en la zona a 9.762 personas.